MAHARISHI KANNAH

miércoles, 17 de mayo de 2017

El Castillo de Arena (La Estabilidad Emocional)

Mucho se habla de la preparación, del talento y de las oportunidades que debemos aprovechar en la vida pero poco se habla de nuestra disposición para afrontar esos retos. Poco se dice que nuestra actitud, y de nuestra estabilidad emocional, para darle la cara positiva a la vida.



Vivir, no se trata de vivir mientras mueres. Vivir
se trata de morir por lo que vives. 


Estamos inmersos en una sociedad que nos dicta que debemos encontrar motivos para ser felices ¡ESO ESTA MAL! Deberíamos ser felices sin tener motivos para ello; como los niños ¡como los locos!

Paradójicamente, VIVIR, es tener motivos, mas no se trata, de encontrar motivos para ello. No se trata de encontrar, o de lograr algo ni de alcanzar una meta para ser felices. Se trata de ser feliz mientras recorres el camino que te lleva a la meta.

Muchas de las veces en las que desaprovechamos oportunidades; de trabajo, de estudios, de viajes, oportunidades de nuevas relaciones interpersonales, etc.; es por que nuestra estabilidad emocional nos juega malas pasadas. Ejemplo: podemos estar muy metidos en nuestros problemas; ya sea amorosos, o en nuestras deudas, o muy concentrados en nuestras metas; al punto tal de que cuando se nos presenta una nueva, o mejor, oportunidad, ¡NO LA VEMOS!


Muchas veces nos dejamos llevar (o mejor dicho, controlar) por nuestras emociones, casi siempre en sentido negativo. Esto nos puede afectar mucho tanto en lo laboral como en lo personal. Podemos tener una alta posición, o haber alcanzado una meta, o podemos estar al lado de quien siempre habíamos soñado, pero; con el sólo hecho de actuar precipitadamente, de no tomar las cosas con calma, de dejarnos controlar por los nervios, de dejar que las palabras y acciones de los demás no afecten; podemos echarlo todo por la borda.

Por eso, muchos teóricos en psicología hablan de los tipos de inteligencia. Puedes ser muy hábil, inteligente y competitivo, pero si tu inteligencia emocional te traiciona y no logras estabilizar tus emociones; puede llegar a perderlo todo (o simplemente no lograr nunca nada). Si haces un análisis de la situación, la mayoría de las malas decisiones se dan cuando estamos siendo afectados, emocionalmente.


Nuestros logros son como un castillo, mas las emociones son como las olas del mar. En cualquier momento, las fuertes olas, pueden destrozarlo. Nuestras metas y logros son débiles, comparándoles con nuestras emociones.

Seamos sinceros, todos tenemos emociones, y estas nos afectan de una u otra manera, pero no todos las manejamos de la misma forma. Todo depende de nuestra crianza, nuestro ADN y de como hemos asimilado nuestras experiencias. No siempre se puede culpar a alguien, severamente, por no saber controlar sus emociones. Muchas personas requieren más ayuda que otras; ¡ESTO ES NORMAL!

Lo que si es importante, es que debemos tratar de compartir, lo más posible, con personas positivas, tratar de experimentar cosas positivas, escuchar música positiva (hay música, películas y literatura que te incitan a la depresión ¡EVÍTALAS, YA!). Debes cambiar, drásticamente, tu manera negativas de ver las cosas. ¡NO HAY TIEMPO PARA ESPERAR!

Hazlo por ti, por tus seres queridos, por tus metas; por tu futuro.

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